Por distintos motivos llevo ya algún tiempo sin publicar un artículo y, no especialmente falta de tiempo, ya que he seguido leyendo artículos de otros y "twitteando" lo que me parece más interesante. Tenía en mente escribir algo sobre las diferencias entre un libro electrónico y en papel y acabo de encontrar en teleread un artículo de Louise Morrison, "What's so great about the feel of books" que de verdad recomiendo a quien entienda un poco de inglés y que me va a servir para ponerme a comentar un par de cosas.
El texto empieza con el tópico de que la sensación de leer un libro en papel se pierde al leerlo en una pantalla. Algo que a mí me ha tocado oír más de una vez y seguro que no soy el único. La autora asocia este tipo de comentarios a una especie de temor debido a la progresiva desaparición de un medio tan común y familiar como es el libro en papel. Estoy de acuerdo con ella en que ni siquiera deberíamos tomarlo como una competición de la que únicamente tiene que salir vivo uno de los dos. La lectura en una pantalla de tinta electrónica de calidad es lo suficientemente cómoda para que el medio, en este caso la pantalla, acabe por ser transparente. A fin de cuentas, cuando nos engancha un libro no es por el roce de las páginas, es por la lectura en sí. Confirmado, en versión electrónica un buen libro sigue enganchando.
Pero volviendo a la pregunta, ¿qué tiene de especial un libro de papel? Según el artículo todo lo relativo a la materialidad del libro: Los libros se pueden colocar en una estantería, se pueden prestar, regalar, pueden ser bellos. Por más fácil y rápido que sea comprar un ebook en amazon, está lejos de la experiencia de comprar un libro en una librería. Aunque parece que el préstamo de libros electrónicos está a la vuelta de la esquina, regalar un eBook, que no es nada más que un archivo, no tiene nada que ver con regalar un libro en papel, eso seguro.
Aunque no hay más que darle la vuelta a la moneda para probar que precisamente que los libros en papel ocupen espacio y pesen, cualquiera que haya hecho una mudanza lo sabe de sobra, es su principal desventaja con respecto a sus sucesores electrónicos. Un eReader normal tiene capacidad para cientos de ebooks.
También los libros electrónicos tienen sus problemas, como el tema de los derechos de autor, la protección DRM, etc. Yo añadiría la falta actual de oferta o el menor cuidado que se pone en su edición. Lo cierto es que están cambiando la industria editorial como hicieron la fotografía digital o el mp3.
Acabo con el mismo pensamiento de la autora del artículo: En lugar de levantar una resistencia inútil contra el libro electrónico, nuestra energía debería estar dirigida a hacer este nuevo medio lo más eficaz posible. Lo único importante es satisfacer el placer por la lectura.
By Manuel Algaba (Ríos de Tinta Electrónica)
Lo que le gusta a mucha gente de los libros en papel es precisamente lo que a mi no me gusta. No me gusta el olor del papel nuevo, ni tampoco a humedad que adquieren algunos dependiendo de donde los guardes. No me gusta acumularlos por las estanterías (ya no me queda mucho espacio donde ponerlos). No siento ese placer fetichista del roce del papel al pasar las hojas.
ResponderEliminarAsí que yo lo tengo bastante claro, los ebooks son mi solución. Pero como comentas en el artículo no creo que este reñido el mundo de los libros tradicionales y los ebooks. Pero parece que hay muchos hooligans del papel que si pudieran hacían desparecer el invento de los ereader y los ebooks de la historia, como si les fuera la vida en ello.
Creo que únicamente una vez leí comentarios que me hicieron comprender por qué la gente prefiere los libros en papel alegando excusas como el tacto del papel, el olor de la tinta o el romanticismo.
ResponderEliminarLa cuestión es que nuestro cerebro asocia sensaciones, y oler una marca de colonia nos recuerda a nuestra novia, o el olor de un pastel a nuestra abuela. Y de repente, una colonia o un pastel nos hacen revivir sentimientos que poco tienen que ver con el olfato, con la colonia o con la comida.
Bien, resulta que la gente a la que nos gusta leer tenemos varias experiencias comunes. Entre las que se encuentran que nos regalen libros, comprar por fin un libro en el que estábamos interesados, colocar el marcapáginas cuando dejamos de leer, o guardar un libro en su estantería cuando hemos terminado de leerlo.
Buena parte de esas experiencias las tenemos ligadas a sensaciones positivas muy fuertes, y así, inconscientemente, el olor de un libro nuevo nos recuerda a los regalos del día de navidad, porque varios de esos regalos fueron libros nuevos. También atesoramos la sensación de haber terminado por fin una gran historia, y nuestro cerebro la asocia al acto de guardar el libro en la estantería, y lo rememora cada vez que vemos el libro en la estantería. Nuestro cerebro nos recuerda lo bien que nos lo hemos pasado terminando de leer los libros cuando los ve en la estantería.
Y así tenemos a un montón de gente a la que le encantan el tacto y el olor de los libros, que disfruta comprándolos, guardándolos en las estanterías... cosas que nada tienen que ver con la lectura en sí. Y usan esas sensaciones como excusa para no pasarse al digital.
Tal como yo lo veo, es como no querer cambiarse de coche, por que con el coche viejo has ido a sitios muy bonitos... pero claro, nadie quiere ir por ahí con un coche de 30 años, cuando puede tener dirección asistida, aire acondicionado, asientos más cómodos y más sitio en el maletero.....
Una buena descripción de los motivos que hacen que mucha gente aún rechace los ebooks.
EliminarComo bien dice Jaxs, me parece que los has explicado bastante bien. Es cierto que el "libro" de toda la vida da para mucho en el tema sensorial y sentimental. Agarrar un libro que en un momento de tu vida te resultó maravilloso y dejó en ti un recuerdo imborrable, es una sensación muy bonita.
EliminarPrecisamente por eso, donde creo deberíamos tener mucho cuidado es con nuestros hijos. A mi modo de ver las cosas, dudo mucho que aprendan a disfrutar leyendo sino es con libros en papel. Libros, comics, cuentos, todo lo que puedan tocar, pasar página, volver, prestar, es lo que poco a poco hace amar la léctura y contribuyen a formar los recuerdos de su infancia.
Es una razón más por la que en determinadas casas, digital y papel no solo pueden, sino que deben convivir.
una disculpa, mi comentario no debe ir en este post pero no econtre un lugar donde dejarlo.
ResponderEliminartengo una pregunta muy importante y no se si a muchos se les ha ocurrido, ¿que es lo que significa "loc" en el kindle?, si, si, se que me muestra el lugar en el cual me encuentro localizado en el libro, pero a que equivale, ¿es al numero de palabras, letras, no puede ser a renglones porque para los libros electronicos no aplica, porque con el solo hecho de aumentar el numero de letra un renglon puede transformarse en dos o tres, etc.. espero que ustedes sepan ya que en la red no he encontrado nada.
postdata: que buen blog, me ha ayudado mucho.
En los ebooks (sean MOBI, EPUB o lo que sea), el viejo concepto de "número de páginas" no tiene sentido ya que el texto se adapta al tamaño de la pantalla, que es variable de un aparato a otro, y además, basta con variar el tamaño de letra o el ajuste de párrafo para que ese "número total de páginas" varíe. Lo que hacen los firmwares de otros lectores que sí te dan el nº de página es hacer una aproximación: tantas palabras equivalen a una página por tanto el ebook tiene "X" páginas.
EliminarAmazon lo hace de otra manera son sus modelos Kindle y te da información invariable: el porcentaje del texto que se ha leído (que es lo que ves a la izq). Da igual si el tamaño de letra es grande o pequeño, si los párrafos se distribuyen así o asá o si tu pantalla es de 5", 6" o 9": te has leído un 30% del texto y punto.
Por otro lado, en los eBooks Kindle también se indica el porcentaje de lectura mediante un número de posicióno localización o loc (que es lo que mencionas). El número de loc se refiere a una línea concreta del texto, para que te sea sencillo encontrar un pasaje, sin importar los ajustes de tamaño, fuente, etc que hayas efectuado en el texto.
Estoy totamente de acuerdo con malcom, nosotros hemos vivido con los libros y ahora nos adaptamos a un nuevo sistema de lectura, pero los peques de casa deben conocer la lectura en los libros de papel, se perderían ciertas sensaciones/situaciones que no se tienen con los ebooks, y que creo que no deben perderse.
ResponderEliminarAunque soy poseedor de un Kindle, intentaré que mi hija lea sus primeros libros en papel, luego cuando sea más mayor que ella decida.
Sería interesante que hicieras un artículo sobre que pasa con tu biblioteca si decides cambiarte de dispositivo, me explico, ¿qué pasa si después de años con un Kindle y miles de euros gastados en libros, decides cambiarte a un dispositivo que lee ePub pero no Mobi?
ResponderEliminarLos archivos tienen DRM, así que bajartelos y convertirlos como que no, ¿los convertirá Amazon por ti?
Y viceversa, ¿y si tengo mis libros en ePub con DRM y decido cambiarme a un Kindle, que pasa con mi biblioteca en la que he invertido miles de euros?
¿Hay soporte legal detrás, la ley ya legisla sobre ello?
Creo que te quedaría un artículo muy bueno si además consigues plantearle esas preguntas a Enrique Dans.
La verdad es que a tu biblioteca no le ocurre nada, en casa acabamos de comprar una librería para colocar las cajas de libros que mi pareja y yo tenemos. Defender el medio electrónico no significa atacar el libro en papel. Estoy totalmente seguro de que mi hijo leerá libros en papel, pero espero que pueda acceder cuando quiera a su versión electrónica.
EliminarCreo que a lo que se refería no es a qué le pasa a una biblioteca física cuando pasas al medio electrónico, sino qué le pasa a una biblioteca de archivos para un lector electrónico si te compras otro que no admite los mismos formatos. A mí también me interesa la respuesta.
EliminarGracias por la aclaración Ozymandias. Con "Calibre" es posible convertir una biblioteca de ebooks de un formato a cualquier otro. El software es fácil de usar y gratuito desde el sitio del desarrollador.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarRespecto de los libros en papel todavía les encuentro dos ventajas fundamentales: confiabilidad de las ediciones. En Internet hay gran número de libros electrónicos. Pero, ¿son ediciones confiables respecto del original o su traducción?, ¿las ediciones están bien maquetadas? No tengo la impresión de estar leyendo un mismo libro cuando cada vez es visualizado de modo diferente según el programa o dispositivo donde se visualice. Y, esa confianza en el libro de papel se materializa en su uso en trabajos de investigación: ¿Cómo puedo citar un texto si no hay páginas fijas, ni ediciones canónicas? Así, su uso se restringe a literatura de entretención o a mantenerse informado de las novedades; pero un trabajo académico, con todas sus características, parece ser todavía con estos textos electrónicos bastante difícil.
ResponderEliminarOtro aspecto no menor es la durabilidad. Esto no afecta directamente al libro electrónico, sino a la máquina que lo visualiza. ¿Por cuanto tiempo voy a disponer de mi Kindle o tendré que estar comprando uno cada dos o tres años? o ¿el formato en que está soportado mi libro podré leerlo dentro de 10 años? Al comprar un libro sé de antemano que durará por décadas, y pasará de mano en mano hasta mis nietos, por lo menos. Y, en ese sentido, no me parece buena idea tener que cambiar cada cierto tiempo los aparatos con que voy a leer mis libros. El libro es fiel siempre, no depende de baterías, ni pantallas, ni de formatos soportados por el artilugio del momento. Basta con tenerlo en la mano y ya es operativo en todas las circunstancias. Y se me cae al suelo, no debo rogar al cielo para que la pantalla no se dañe. Y, si sufre algún daño, basta un poco de pegamento para repararlo.
Desde lo anterior, creo que el libro de papel en ciertas áreas de investigación será muy difícil de ser desplazado. A menos que el libro electrónico sea una versión facsímil del impreso.
Pues hombre razón tienes en casi todo. Ahora bien, ¿no crees que las propias editoriales son las que deberían editar y maquetar un libro académico de la mejor manera para adaptarlo al medio digital? Las posibilidades que se abren con un ebook son múltiples, enlaces a documentos, referencias, links a páginas web desde el mismo libro, anotaciones del autor fáciles de leer sin pasar una página, anotaciones del lector, etc...La mayor limitación que yo le veo por el momento es el color y quizás el tamaño.
EliminarAhora imagina un lector digital de tinta electrónica a color de una tamaño digamos A4. Sinceramente le daría mil vueltas al papel para uso académico, ya que tendrías las mismas virtudes que en este pero multiplicadas por mucho.
Gracias por el comentario Klein1965. No podría estar más de acuerdo contigo. El libro es de hecho el único soporte multimedia que no necesita de un reproductor.
ResponderEliminarComo dices tú con el formato electrónico es en este momento es verdaderamente difícil de hablar de edición canónica para un cierto tipo de libros, pero con el desarrollo de nuevos formatos seguramente será posible. La fotografía digital también necesitó su tiempo para sustituir a la analógica.
La falta de calidad de muchos archivos electrónicos creo que tiene que ver con que muchos de ellos provienen directamente de OCR y no tienen detrás un trabajo profesional de revisión y edición. Espero que poco a poco los escritores y las editoriales se tomen más en serio la calidad de la edición electrónica. En una novela que lees en la playa quizá es pasable, en un libro académico no. Un saludo.
Para mi leer un Libro en papel es muy magico, sentir el olor del papel la textura, es algo que no lo va a cambiar un Kindle.
ResponderEliminarYo tengo hace poco el kindle touch y me gusta mucho, cargo mis pdf y dema texto que no tengo impreso, tambien es una gran ventaja.